LO QUE NOS DEJÓ EL MUNDIAL SUB-17 Y LOS JOTITAS
por: Alex Albornoz M.
El mundial Sub-17 finalizó y tiene como campeón a la selección de Nigeria, con este título los nigerianos suman tres campeonatos mundiales en la categoría sub-17. De lo que podemos esbozar que: tanto Ghana y Nigeria son equipos de alta competencia a nivel de menores; pese a esto la pregunta viene por ahí, ¿Por qué estos equipos que naturalmente nutren a su selección no consiguen mayores logros en los mundiales de mayores? Y esto podemos apreciarlo al revisar las estadísticas, que los africanos en los últimos mundiales no han pasado los cuartos de final.
Por otro lado, nuestra selección se ubicó en el mundial como el octavo mejor equipo, ya sé que hubiésemos querido ubicarnos unos escalones más arriba, pero siendo precisos, la labor realizada por los jotitas estiro al máximo sus capacidades. Y esto no quiere decir que no estemos para más, sino que a veces las circunstancias como sucedió en el partido contra Ghana fueron adversas. Que además fue un reto, que nuestros muchachos supieron afrontar dignamente, con altura y sin complejos de por medio a pesar de las especulaciones que giraban en torno a la edad de los ghaneses.
Ahora bien, ¿cómo se logró esto?, por ahí leía a varios ex-mundialistas peruanos señalando que la base de este equipo fue la disciplina y la entrega, que conjugado con un arduo trabajo de por medio, germinó en una madurez que se vio reflejado en el césped. Lo cierto es que, no podemos negar que este grupo de muchachos mostró una cara distinta a la hora de jugar cada partido. Muchas veces la aptitud y actitud dicen más que cien palabras. Y ellos a su corta edad manejaron y comprendieron esto.
Sin duda el desempeño táctico, el talento así como el trabajo técnico fueron las tres espadas que desenvainó con acierto nuestra selección. Y eso lo sabe todo aquel que degusta y gusta del fútbol. Así lo expresaba Juan José Oré: “Me llena de mucho orgullo haber dirigido a un grupo de muchachos que lo dieron todo dentro del terreno de juego. Ese mismo sentimiento de orgullo lo deben tener todos los peruanos porque éste es un grupo maravilloso”. Sin duda alguna.
Ahora, sin duda alguna esto debe ser el inicio de una mejora en nuestro balompié nacional, donde lo prioritario debe ser la formación de las categorías menores, por que a partir de ello se estará ejecutando un plan y un esquema que a la larga dará sus frutos. Ya es hora que el simplismo, el lucro y los malos manejos que impera en la federación se destierre. Y para ello es necesario que haya cambios urgentes dentro de la Federación. No es posible que ahora ciertos bufones y fantoches que se alimentan de los triunfos ajenos se suban cuál vikingos al barco. ¡VAMOS MUCHACHOS, EL FUTURO DEL BALOMPIÉ PERUANO ESTÁ EN USTEDES!
Por otro lado, nuestra selección se ubicó en el mundial como el octavo mejor equipo, ya sé que hubiésemos querido ubicarnos unos escalones más arriba, pero siendo precisos, la labor realizada por los jotitas estiro al máximo sus capacidades. Y esto no quiere decir que no estemos para más, sino que a veces las circunstancias como sucedió en el partido contra Ghana fueron adversas. Que además fue un reto, que nuestros muchachos supieron afrontar dignamente, con altura y sin complejos de por medio a pesar de las especulaciones que giraban en torno a la edad de los ghaneses.
Ahora bien, ¿cómo se logró esto?, por ahí leía a varios ex-mundialistas peruanos señalando que la base de este equipo fue la disciplina y la entrega, que conjugado con un arduo trabajo de por medio, germinó en una madurez que se vio reflejado en el césped. Lo cierto es que, no podemos negar que este grupo de muchachos mostró una cara distinta a la hora de jugar cada partido. Muchas veces la aptitud y actitud dicen más que cien palabras. Y ellos a su corta edad manejaron y comprendieron esto.
Sin duda el desempeño táctico, el talento así como el trabajo técnico fueron las tres espadas que desenvainó con acierto nuestra selección. Y eso lo sabe todo aquel que degusta y gusta del fútbol. Así lo expresaba Juan José Oré: “Me llena de mucho orgullo haber dirigido a un grupo de muchachos que lo dieron todo dentro del terreno de juego. Ese mismo sentimiento de orgullo lo deben tener todos los peruanos porque éste es un grupo maravilloso”. Sin duda alguna.
Ahora, sin duda alguna esto debe ser el inicio de una mejora en nuestro balompié nacional, donde lo prioritario debe ser la formación de las categorías menores, por que a partir de ello se estará ejecutando un plan y un esquema que a la larga dará sus frutos. Ya es hora que el simplismo, el lucro y los malos manejos que impera en la federación se destierre. Y para ello es necesario que haya cambios urgentes dentro de la Federación. No es posible que ahora ciertos bufones y fantoches que se alimentan de los triunfos ajenos se suban cuál vikingos al barco. ¡VAMOS MUCHACHOS, EL FUTURO DEL BALOMPIÉ PERUANO ESTÁ EN USTEDES!
Publicar un comentario
Tu comentario: